29 de octubre de 2018

SENSIBILIDAD EN LONDRES


El gobierno británico dijo que a pesar del Brexit el estatus de las Malvinas no cambiará

Salió a contestar tras la versión de un diario británico, que aseguraba que Jorge Faurie busca aprovechar la separación de las islas de la Unión Europea para “quitárselas” al Reino Unido y traerlas a la Argentina. Pero el ministro desmintió al Telegraph.

 
El canciller Jorge Faurie y el embajador en Londres Renato Sersale - Chatham House.
  
Por Natasha NIEBIESKIKWIAT

El Reino Unido envió a la Argentina este viernes un mensaje contundente y previsible. “No hay posibilidad de que cambie el estatus de las Islas Falkland (Malvinas) a posteriori del Brexit. El Gobierno del Reino Unido ha dejado en claro que sus territorios de ultramar, entre ellos las Islas Falkland, mantendrán su actual relación con el Reino Unido después de que el país salga de la Unión Europea", señalaron a Clarín desde el Foreign Office.

Lo mismo señaló a Bloomberg en Londres la vocera de Theresa May, Alison Donelly.  Contestaron así al paso del canciller Jorge Faurie por el Reino Unido, adonde se reunió con su par Jeremy Hunt y dio una charla en el Chatham House, y habló con el diario The Daily Telegraph, que lo citó el jueves a la noche señalando que la Argentina buscaba explotar la separación de Gran Bretaña de la Unión Europea para aumentar los esfuerzos locales para sacar a las islas del Reino Unido y acercarlas a Buenos Aires cuando cesen los tratados europeos que incluyen a los llamados Territorios de Ultramar, que son las ex colonias británicas.

Poco después de las repercusiones en la prensa británica, que mostraron un fuerte nacionalismo local, Faurie hizo enviar al Telegraph una carta en la que manifestó su enojo porque el título del diario "no lo interpretaba para nada". Y señaló con su literal incluido en la grabación de la entrevista. "La Unión Europea podría evaluar esa decisión de cómo proceder y pararse frente a esa cuestión y podría haber un cambio" había dicho, pero, dijo en la carta, que eso no reflejaba el título del Telegraph. El titular que causó revuelo y la fuerte respuesta del Foreign Office y de la oficina de prensa de May señaló: "Argentina apunta a usar un no acuerdo de Brexit para sacar a las Falklands del Reino Unido".

En su carta al diario Faurie señaló que también dijo que a la pregunta de qué pasaría ante un escenario sin acuerdo de Brexit replicó: "Estamos ahí... para hablar, negociar y ver cuál va a ser la resolución para que la gente de las islas esté más en contacto con el continente". Por cierto, tal como publicó este diario, uno de los fuertes temores en Malvinas tras el Brexit es quedar debilitados ante el histórico reclamo de soberanía por parte de Argentina. Ello sin contar que perderían mercados europeos libre de impuestos al no gozar más de los beneficios de pertenecer a la UE.

Efecto Brexit en Malvinas: los kelpers temen quedar debilitados frente al reclamo de la Argentina

Lo ocurrido con el Telegraph no deja de llamar la atención porque sigue mostrando lo sensible que es la cuestión de las islas entre los dos países pese al fuerte acercamiento bilateral, al punto de generar una advertencia del gobierno británico ante supuestas palabras a un diario que al final Faurie no le dio. Muestra también lo delicado que será hasta en la comunicación de las partes el viaje de May a Buenos Aires para la cumbre del G20 del 30 de noviembre y 1 de diciembre.

Esta semana, en una entrevista con Clarín, Faurie había señalado algo que resultaría contradictorio con lo del Telegraph. "Nosotros tenemos una relación con el gobierno británico, que incluye el diálogo de quienes viven en las islas. Nuestra relación es generar un mayor vínculo entre la parte continental y la parte insular. Que quienes vivan en las islas sientan que pueden llegar al continente para educarse, para atenderse en temas de salud y para hacer comercio", había señalado.

Fuente: www.clarin.com


EL CONFLICTO POR LA SOBERANÍA




Los kelpers aceptan que el segundo vuelo a Malvinas también haga escala en el continente argentino. Lo aseguró a Clarín uno de los consejeros de las islas. El primero ya tiene parada en Río Gallegos.

“Como parte del proceso de establecer un nuevo vuelo, estamos trabajando sobre entendimientos previos. Aceptamos que un nuevo vuelo a Sudamérica incluya una breve escala ida y vuelta por mes en Argentina, como ocurre actualmente con el vuelo de Latam. Eso es todo lo que le puedo decir”, señaló a Clarín desde las Malvinas el consejero legislativo Barry Elsby. De esta manera, por primera vez, los isleños aceptan en público que el segundo vuelo que se está negociando desde el año pasado cuando se firmó un acuerdo especial haga escala en una ciudad continental. Ahora lo que se discute es en qué aeropuerto.

Aunque en Londres y Buenos Aires no quisieron reconocerlo oficialmente para seguir avanzando, este fue el principal escollo para lograr que a octubre de este año ya estuviera funcionando el acuerdo tal como se habían propuesto inicialmente.

El canciller Jorge Faurie va a Diputados a dar explicaciones sobre Malvinas

Los isleños querían evitar una escala en el continente al punto que se adelantaron con un comunicado no consensuado que enojó al Gobierno argentino e incluso a Latam. Este decía que iba a ver un vuelo San Pablo - Mount Pleasant y evitó más definiciones.

Ahora las palabras de Elsby muestran el cambio de actitud, pero se siguen negando a que la escala sea en Buenos Aires. Es lo que quiere Argentina.

Si fuera por los isleños la escala sería en Córdoba o en Río Gallegos, adonde llega hoy el vuelo de Latam según los acuerdos de 1999. Ese vuelo a Río Gallegos aterriza una vez por mes de ida, el segundo sábado del mes y vuelve a Santa Cruz, el tercer sábado. Pero los puertos originales son la ciudad chilena de Punta Arenas y Mount Pleasant.

Jorge Faurie: "Los isleños pueden venir a educarse, atenderse y hacer negocios"

“Sobre los vuelos, también hemos visto avances hacia un acuerdo para un segundo vuelo desde las islas al continente. Espero que el proceso llegue a una conclusión en las próximas semanas. Más contacto entre las islas y el continente es algo que interesa a todos”, dijo el embajador británico Mark Kent al diario Perfil este fin de semana.

El tema es muy sensible al punto de que el canciller Jorge Faurie irá a dar explicaciones este lunes a Diputados convocado por el kirchnerismo, a raíz de declaraciones que hizo en Londres a Clarín sobre el vínculo que pretende con los kelpers.



REMÓ MÁS DE 1.700 KM EN HOMENAJE A LOS HÉROES DE MALVINAS

Informe de Emiliano GUARDIA


Norberto Luna es un santotomesino, de 68 años, que decidió homenajear a los Héroes de Malvinas remando más de 1.700 km. desde Formosa hasta Santa Fe.

A pesar de que le amputaron una pierna hace 42 años por una fractura expuesta mal curada, el hombre preparó su kayak y partió el 19 de agosto de Pozo del Tigre hasta llegar este viernes al río Santa Fe, en un recorrido que tuvo momentos "emotivos y preciosos", según contó el protagonista.

"A la idea la llamé a 'Héroes de Malvinas', en homenaje a los que lucharon por nuestra Patria Fueron emociones tras emociones, que gracias al remo pude salir adelante en mi vida", dijo en diálogo con Cadena 3.

En el momento final de su hazaña, fue recibido en el Liceo Naval por alumnos y autoridades de la institución. En el emotivo momento estuvieron presentes también ex combatientes de Malvinas y familiares y amigos del protagonista de esta historia. Luego, siguió remando hasta el Club Azopardo, donde desembarcó.
Fuente: www.cadena3.com

LA GUERRA DE MALVINAS SE PERDIÓ EN LONDRES Y EN MADRID, NO EN LAS ISLAS

Por Licenciado Juan Guillermo MILIA (*)

La Guerra de Malvinas se perdió en Londres y en Madrid, no en las islas - Por J. G. Milia
La guerra    
      
Todos los 2 de abril se conmemora el aniversario de la recuperación de las islas irredentas del Atlántico Sur por nuestras FFAA Muere allí, la primera víctima, el capitán Giachino, quien al solicitar al gobernador la rendición de la plaza lo hizo como un caballero y como respuesta recibió un disparo mortal.

Más tarde otra muestra del traidor proceder del gobierno británico se da cuando el crucero General Belgrano es atacado cuando se retiraba de la zona de conflicto por haber cumplido su misión, sin el menor reparo por la suerte de sus tripulantes, en las azarosas y frías aguas del Atlántico Sur. El ataque misilístico del submarino atómico costó la vida de 323 marinos argentinos.

Luego, ya en plena batalla, los certeros ataques de la aviación argentina hicieron buen uso de los 4 misiles Exocet que poseían, volando al ras de las aguas para evitar ser detectados por los radares enemigos.

En el campo diplomático cabe agregar el falaz engaño del gobierno norteamericano de Reagan, que no tuvo reparos en simular una posición neutral en el conflicto asumiendo per se la función de intermediario, haciéndole creer a un poco informado presidente de facto que suponía que le habían dado luz verde para encarar semejante aventura bélica. No reparó el alcohólico general que unen a ambos países vínculos culturales, históricos, comerciales y geoestratégicos. Además, es su principal aliado y conspicuo miembro de la OTAN. Mientras, se ganaba tiempo de esta manera para que llegaran los casi 200 barcos de la fuerza de tareas británica al escenario del conflicto.

Este sucio juego lo cumplió el secretario de Estado, mientras que el ministro de Defensa le proporcionaba toda la ayuda bélica necesaria, incluso satelital, para lo que tuvo que desviar la órbita de uno de sus satélites Landsat a fin de cubrir la zona del conflicto y de esta manera darles información precisa a las fuerzas inglesas.

A ello cabe agregar la actitud carente de sinceridad del presidente Pinochet de Chile, que le proporcionó toda clase de apoyo al invasor británico, mientras aseguraba a nuestro país que la frontera oeste estaba bien resguardada.

Sin esa ayuda, escribió un alto oficial retirado de la Royal Navy en sus memorias, “difícilmente hubiéramos ganado la guerra”.

En definitiva, fue una guerra relámpago, mal preparada, que concluyó con la rendición de nuestras FFAA ante las del Reino Unido, evidentemente mejor equipadas. Pero no constituyó un paseo para las tropas de élite inglesas fogueadas en muchos escenarios y con vestimenta y equipo adecuado al terreno donde iban a actuar. Los propios británicos destacan el coraje y valentía de nuestros soldados.

El cese de hostilidades

Todo esto preparó el camino para lo que años más tarde haría incursionar a la Argentina por el camino de la humillación y pérdida de soberanía. Todos los países que fueron derrotados por los Estados Unidos y sus aliados hubieron de pagar caro ese atrevimiento.

En Versalles, al finalizar la Primera Guerra Mundial, los perdedores fueron castigados muy severamente con pérdidas territoriales, pesadas indemnizaciones, sanciones financieras, sociales y políticas. El país más castigado fue Alemania. Este exceso en las sanciones hirió muy profundamente la sensibilidad del pueblo alemán, lo que unido al desastre económico de la República de Weimar, posibilitó el triunfo de Hitler como canciller de Alemania en 1933. De allí al comienzo de la Segunda Guerra Mundial, sólo mediaba un paso que costó a la humanidad 60 millones de víctimas.

En forma similar que Alemania, Austria, Japón, Italia e Irak, a la Argentina también era necesario castigarla por la Guerra de las Malvinas.

El cese de hostilidades significó la rendición del jefe militar de las islas al jefe británico de ocupación. El general Menéndez, jefe militar durante la ocupación argentina, había jurado que sólo muerto lo sacarían de las islas.

Tratado de Versalles argentino

Su nombre propio es "Tratado Anglo-Argentino de Promoción y Protección de Inversiones". Fue firmado en Londres en 1990 y con la aprobación de nuestros representantes en el Congreso de la Nación, se convirtió en ley N° 24.184.

Como dicha norma constituye una vergüenza para el país, es necesario destacar quiénes fueron sus gestores y firmantes: el presidente Menem y su ministro Cavallo.

Entre otras humillantes cláusulas, se destacan por su ignominia las siguientes: Según dicho tratado el Reino Unido tendrá el control sobre las FFAA argentinas, especialmente en la rica Patagonia, donde ya existen vastas inversiones yanquis e inglesas. El art. 5º del Tratado dispone que la economía argentina se abriría y desregularía en forma irrestricta (art. 12) de manera que empresas estatales pudieran ser vendidas y privatizadas a precio vil (petróleo, minería, ferrocarriles, autopistas, líneas aéreas, electricidad, gas, agua, fondos de pensiones, seguros, reaseguros, bancos, etc.).

Madrid: la firma del acuerdo de paz entre Argentina y Gran Bretaña

El embajador argentino en España en aquel entonces, Lucio García del Solar, confesó con toda sinceridad su desconocimiento del tema Malvinas hasta que la casualidad lo colocó -dice él- en el trance de constituirse en el negociador por la Argentina, en las tratativas realizadas entre 1989 y 1990, que concluyeron con el restablecimiento pleno de las relaciones diplomáticas ocho años después de finalizada la Guerra de las Malvinas. El documento se firmó en 1990.

Nos conmueve la sinceridad del embajador, pero nos preocupa mucho saber que la suerte de tan importante acuerdo estuviera en manos de un diplomático que confiesa sin rubor desconocer uno de los más importantes temas de la agenda de la diplomacia argentina.

El acuerdo implicaría la reapertura de las respectivas representaciones diplomáticas.

Entrando en la parte sustantiva del acuerdo, diremos que la bilateralidad que se determina en el mismo para la política militar, para la política exterior y para la política económica, implica el reemplazo de la República Argentina independiente por una virtual confederación anglo-argentina.

De allí que otros califican este acuerdo como el ingreso de la república sudamericana en la Comunidad Británica de Naciones.

Es decir, la Argentina adhiere a todo a cambio de nada. Una franca derrota.

Finalmente, diremos que el vaciamiento del patrimonio del Estado vendiendo por la décima parte de su valor las empresas de servicios públicos, la política de vaciamiento del patrimonio de los particulares esquilmados por impuestos y gravámenes confiscatorios y la política de despojo de los salarios y jubilaciones constituyen lisa y llanamente el pago de la indemnización que nos impuso Gran Bretaña para resarcirse de los gastos de la Guerra de las Malvinas.

(*)  Especialista en Política Internacional
Fuente: losandes.com.ar


DOCUMENTOS BRITÁNICOS REVELAN EL MISTERIO DEL HELICÓPTERO ARGENTINO QUE DESAPARECIÓ EN UNA MISIÓN DE RESCATE

Por Adrián PIGNATELLI

El Alfa Eco 505


Guerra de Malvinas. A las 9:05 horas del 9 de mayo se recibió el siguiente mensaje: "Aquí Narwal. Somos atacados por aviones ingleses en la latitud 52 45' Sur y longitud 58 02' Oeste. Tenemos heridos graves".

El Narwal era un barco pesquero perteneciente a la Compañía Sudamericana de Pesca. De 1350 toneladas, operaba en aguas argentinas desde febrero de 1975 y tenía una dotación de un capitán y 24 pescadores. Simulaba realizar tareas de pesca al este de Puerto Argentino, pero su misión era la de efectuar tareas de inteligencia sobre la flota británica. Para ello, a bordo estaba el teniente de navío Juan Carlos González Llanos.

Para los ingleses, la del Narwal no era una presencia nueva. Según recuerda en sus memorias el almirante Sandy Woodward, su oficial de guerra le había informado: "Es ese maldito barco pesquero otra vez, señor. Acaban de identificarlo. El Narwal, el mismo que debimos alejar hace diez días, la noche anterior a que llegáramos a la zona".

Dos Sea Harrier, armados con bombas de 500 kilos y con sus cañones de 30 mm fueron enviados a detener la nave. A pesar que dos bombas cayeron a los costados del barco, una tercera impactó sobre la cubierta de popa, hiriendo gravemente a uno de los marineros, Omar Rupp.

Luego, los aviones ingleses hicieron varias pasadas disparando 200 proyectiles. Como el barco se hundía, el capitán ordenó abandonarlo. Antes de hacerlo Rupp, con su pierna destrozada, alcanzó a pedir que cuidasen a su familia y murió. En el barco tenía un triciclo para su hijo que había nacido cuando ya estaba embarcado.

Ya en las balsas, los marineros escucharon, sobre las nubes, el motor de un helicóptero grande. Pensaron que era argentino. Era un Sea King inglés.

De Moody Brook a Monte Kent

A esa misma hora, el Batallón de Aviación de Combate 601 del Ejército Argentino apuraba la mudanza de su base que habían establecido en Moody Brook. Una semana antes, fuerzas argentinas habían avistado un helicóptero inglés que transportaba comandos de la SAS. Su misión era la de localizar la base de helicópteros argentinos, darle las coordenadas a la flota para así destruirla. De esta manera, cortarían el principal transporte con que contaban las fuerzas argentinas. Si bien el ejército envió un grupo de comandos para realizar una contraemboscada, no hubo un encuentro entre ambos grupos.

El bombardeo sobre Moody Brook produjo la destrucción de un helicóptero Puma de Prefectura y dañó a un Bell UH-1H (el Alfa Eco 410) que, si bien podría haberse reparado, no había tiempo ni recursos para hacerlo.

A primera hora de ese 9 de mayo el batallón se establecía, en mejor resguardo, en Monte Kent.

Uno de los pilotos más experimentados con el que contaba la unidad era el teniente Juan Carlos Buschiazzo. Había realizado cuatro campañas antárticas, siempre piloteando un helicóptero. Era un piloto civil que se había asimilado al Ejército, haciendo el curso en la Escuela de Combate General Lemos y además había asistido a clases de perfeccionamiento en Francia.

El 2 de abril lo sorprendió haciendo trabajos administrativos en una oficina del Comando de Arsenales. "A mí no me van a mandar a Malvinas porque estoy en Arsenales. Me presento como voluntario" -le dijo a su esposa.

Otro era el teniente primero Roberto Mario Fiorito, de 30 años, fanático de San Lorenzo. Apenas egresado del Colegio Militar, fue destinado a Jujuy y luego a Tucumán; posteriormente pidió el pase a Córdoba para hacer el curso de paracaidista y de ahí solicitó ingresar a Aviación de Ejército para ser piloto de helicóptero.

Roby, como se lo llama en la familia, había participado dos veces en la campaña antártica, también como su amigo Buschiazzo, piloteando un helicóptero. En noviembre de ese año tenía fecha para casarse.

La dotación estaba conformada por dos Chinook, cinco Puma, tres Augusta y nueve Bell Uh-1H. Los oficiales más antiguos volaban los Chinook, que son los helicópteros más grandes, con dos rotores; los tenientes primero piloteaban los Puma; y los recién egresados, con pocas horas de vuelo, lo hacían en los Bell UH-1H. Los que poseían un poco más de experiencia volaban los Augusta.

El Narwal fue hundido por un misil británico lanzado desde el Coventry 
El Narwal fue hundido por un misil británico lanzado desde el Coventry

Los pilotos estaban ayudando a descargar el equipo que traían desde Moody Brook cuando se recibió la orden de que un helicóptero bimotor debía dirigirse al Centro de Operaciones de Vuelo, ubicado en la zona del hipódromo, para recibir órdenes sobre una nueva misión: localizar a los sobrevivientes del Narwal, y pasar las coordenadas a un buque mercante, anclado en el Estrecho de San Carlos, para que los náufragos fueran rescatados.

La misión se la adjudicaron a Buschiazzo, pero su helicóptero había sufrido un desperfecto de último momento. Entonces, fue convocado Fiorito. Pero debía hacerlo con un copiloto.

En medio de una sobremesa todos pujaban por ser voluntarios. Hasta que apareció Buschiazzo y dijo que como la misión se la habían dado primero a él, sería el copiloto. A Fiorito lo alegró, quien estaba un poco deprimido ya que el día anterior se había hecho tiempo para llamar a su mamá por el día de su cumpleaños. Buschiazzo pudo haberse hecho el distraído y quedarse en tierra, pero acompañó a su amigo.

Como mecánico iría el sargento Horacio Raúl Di Motta. Había nacido en Goya, pero desde chico la familia se había radicado en Gualeguaychú siguiendo a su padre, suboficial enfermero. De chico había aprendido a querer la milicia. Le decían Lito, y ya de pantalones cortos lo recuerdan haciendo la venia.

"Los días más felices de nuestra infancia eran cuando mi papá nos llevaba a almorzar al regimiento", recuerda su hermana Nora. A los 15 años, comenzó a estudiar Mecánico de Aviación. Le había tocado estar en Tucumán y fue movilizado cuando Argentina estuvo por ir a la guerra con Chile por el conflicto limítrofe del Canal de Beagle. Su hermana aclara que "él amaba todo esto. Acompañamos su decisión. Iban a recuperar lo que era nuestro".

Los protagonistas de esta historia, Buschiazzo, Fiorito y Di Motta 
Los protagonistas de esta historia, Buschiazzo, Fiorito y Di Motta

La del rescate era una misión suicida. No solo porque el piloto de helicóptero de Ejército no estaba instruido en rescates en el mar, sino que la máquina no contaba con el equipamiento adecuado para semejante tarea e iba a estar a merced de la aviación y artillería naval enemiga. Y con un estado del tiempo pésimo.

La nave que se usaría es la única que había cruzado volando desde el continente. La cargaron con sogas, botes y chalecos salvavidas y víveres. Además, llevaban dos handys con frecuencia naval para poder comunicarse con los náufragos, una vez que fueran localizados.

Sabían el peligro que corrían. Di Motta se quitó su gorra y se la dio a un compañero, de apellido González. "Esta te la dejo a vos, porque la vas a necesitar más que yo". Años más tarde, un anciano González le daría a la hermana de Di Motta la insignia que llevaba esa gorra.

Di Motta corrió a alistar al helicóptero, mientras que el resto del grupo se tomó una fotografía. En el extremo derecho, aparece parado Buschiazzo y agachado, Fiorito. Sería su última foto.

La última foto que se tomó la dotación. Al extremo derecho está Buschiazzo parado y agachado, Fiorito. El que falta es Di Motta que en esos momentos estaba poniendo a punto el helicóptero. 
La última foto que se tomó la dotación. Al extremo derecho está Buschiazzo parado y agachado, Fiorito. El que falta es Di Motta que en esos momentos estaba poniendo a punto el helicóptero.

Cerco sobre Puerto Argentino

A las 5 de la mañana de ese mismo 9 de mayo, el destructor Coventry y la fragata Broadword tomaron posición al sur de Puerto Argentino para formar parte de una trampa misilística y evitar que aterricen o despeguen aviones desde la pista de Puerto Argentino. Desde las islas avistaron a estos buques ingleses, con lanchones de desembarco y con capacidad misilística.

Entonces se ordenaron misiones de ataque contra estas naves. En esa circunstancia, dos aviones A4C Skyhawk, piloteados por los tenientes Jorge Eduardo Casco y Jorge Ricardo Farías -que formaban parte de una escuadrilla que integraban el capitán Jorge Osvaldo García y el alférez Gerardo Guillermo Isaac-, el mal tiempo les jugó una mala pasada y se estrellaron en unas islas cercanas al intentar atacar a los buques.

El hundimiento del Coventry. Desde allí se disparó el misil Sea Dart contra el helicóptero argentino 
El hundimiento del Coventry. Desde allí se disparó el misil Sea Dart contra el helicóptero argentino

A las 11 de la mañana dos Lear Jet, pertenecientes al Escuadrón Fénix, que carecían de armamento, intentaron una maniobra de diversión. Fue cuando desde el Coventry se disparó, por primera vez en la historia, el misil Sea Dart. En realidad, fueron dos proyectiles, lanzados a una distancia de 165 millas (unos 265 km), el límite máximo de su alcance. Uno pasó entre medio de los dos Lear Jet, los que descendieron abruptamente y emprendieron regreso a la base.

El comandante del Coventry David Hart-Dyke aseguró que el blanco detectado se trataba de un Hércules, escoltado por Skyhawk. Cuando el capitán del Coventry le informó a Woodward de "un derribo probable", el almirante le respondió: "Tranquilo, David. No dispare hasta que les vea el blanco de los ojos".

La misión y el misil Sea Dart

Minutos antes de las 4 de la tarde, en medio de una espesa niebla, el helicóptero con Buschiazzo, Fiorito y Di Motta despegó. Inmediatamente comunicó su plan de vuelo para no ser blanco de la artillería argentina. La última comunicación que se recuerda es a Fiorito decir "estamos en zona de trabajo", aunque pudo haber dicho "proa al trabajo". No quedaron grabaciones.

Desde el radar 967 de la Broadword fue detectado un blanco lento, en movimiento sudeste. Por data link le pasó al Coventry los datos de posición, se asignó el blanco al radar de control de tiro 909 y se lanzó un solo misil Sea Dart. Luego de navegar 13 millas (21 km), impactó en ese blanco que se movía lentamente. Era el primer Sea Dart que hacía blanco.

El recorrido realizado por el Afa Eco 505 
El recorrido realizado por el Alfa Eco 505

Al día siguiente, se mandaron tres vuelos de búsqueda, un Augusta de Ejército, después un Pucará y por último un Aeromacchi. Todos bordearon la costa, pero sin divisar nada.

Durante 36 años, en Argentina se creyó que el helicóptero había caído al mar. Pero otra podría ser la historia.

El misterio del helicóptero argentino

En mayo de este año salieron a la luz valiosos datos que revelarían el lugar donde el helicóptero Puma fue derribado. No es en el mar, como se suponía, sino en tierra. Y los documentos señalan que aún estaría allí.

El mérito de este hallazgo le corresponde al coronel Luis Bennardi, jefe de personal de Aviación de Ejército y al subteniente de Reserva Mariano Sciaroni, dos estudiosos de la especialidad a la que pertenecen. Ellos pacientemente fueron reconstruyendo los hechos y recopilando valiosos documentos que obtuvieron en Gran Bretaña y que, posiblemente, sirvan para comprobar que otra fue la historia.

Bennardi y Sciaroni le relataron a Infobae que el 22 de junio de 1982, el mayor Ewen Southby-Tailyour recibió la orden de recorrer en helicóptero y detectar la presencia de restos donde se habían producido derribos. Este militar es el que encontró en la isla Borbón el Lear Jet que piloteaba el vicecomodoro Rodolfo de la Colina. Más restos del mismo aparato se hallarían años después, por casualidad, luego de que una gran sequía en la zona los dejara al descubierto.

El subteniente Mariano Sciaroni y el coronel Luis Bennardi, responsables de la investigación sobre el helicóptero Alfa Eco 505 
El subteniente Mariano Sciaroni y el coronel Luis Bennardi, responsables de la investigación sobre el helicóptero Alfa Eco 505

En 1978, Southby-Tailyour fue designado comandante de guarnición de los Royal Marines, en Malvinas. En las islas fue ascendido a mayor. Uno de sus hobbies era el de navegar por las costas de las islas en su yate. Entusiasmado escribió un libro sobre las costas del archipiélago y se lo ofreció a una editorial inglesa para su publicación, aunque no les interesó.

Cuando estalló la guerra, recuperó el manuscrito y se lo llevó al comandante de brigada. Se lo cedió con la condición de ser parte de la expedición militar al Atlántico Sur. Él asegura que se eligió el estrecho de San Carlos para desembarcar gracias a los datos que en su momento había relevado. "Fue la persona que más colaboró para la recuperación de las islas", lo elogiarían en Gran Bretaña. Este teniente coronel retirado lleva escritos 15 libros sobre una variada temática que incluyen historia militar, yachting y novelas.

La isla Bouganville, también conocida como Lively Island, recuerda a Louise Antoine de Bouganville, un francés que en 1763 fundó la colonia de Port St. Louis, hoy Puerto Soledad. En esa isla, Southby-Tailyour halló restos de un Puma y de un Skyhawk. Así lo pudo reconfirmar gracias al oficial de vuelo de la HMS Avenger. Según ellos, estaba perfectamente visible su tren de aterrizaje. "Estaba muy quemado, no vi restos humanos, por suerte", remarcó. Así se lo hizo saber al subteniente Sciaroni.

Luego de reportar el hallazgo, el día 24 los ingleses enviaron a una patrulla de Gurkas al lugar. El parte elaborado dice "habiendo encontrado numerosas piezas de una aeronave destrozada y equipos como botes salvavidas, pero no restos humanos…".

Dos fuentes coincidían en el hallazgo de restos de un helicóptero Puma en la isla Bouganville.

Los detalles

¿Puede ser posible que el Puma se encuentre en tierra? La minuciosa investigación que está desarrollando Aviación de Ejército señala que el horario de derribo fue a las 16:07 y que, como mucho, el helicóptero voló un total de 17 minutos.

Asimismo, pudieron confirmar la posición de los buques y, de esta manera, calcular la distancia desde la que se lanzó el misil. Cuando estos datos se asocian a la distancia del blanco, coinciden con el lugar donde estarían los restos del Puma.

Otro elemento que enriquece la investigación es la bitácora del oficial de guerra aérea del Coventry, documento que salió a la luz este año. En su entrada 39 escribió:

"Más tarde ese día, mientras operábamos otra vez en la línea del Sea Dart al sur de Stanley, Broadword nos indicó (vía Link) que una aeronave volaba lentamente hacia el sudeste, en las cercanías de Puerto Harriet. Un solo misil Sea Dart fue disparado que impactó en el blanco. Fue visto explotar en una manera espectacular y fue posteriormente identificado como un helicóptero Puma argentino. El momento del incidente fue en las cercanías de Port Pleasant, probablemente sobre tierra".

Mapa de dónde podría haber caído el helicóptero 
Mapa de dónde podría haber caído el helicóptero

 El lugar en tierra donde podría estar la nave
El lugar en tierra donde podría estar la nave

De todas maneras, los datos precisos los guarda el radar del Coventry, que está en el fondo del mar desde el 25 de mayo de 1982, cuando fue hundido por dos bombas de 250 kilos arrojadas por aviones Skyhawk que impactaron debajo de su línea de flotación.

El coronel Bennardi ya tomó contacto con el agregado militar en la embajada británica en Buenos Aires, quien hoy tiene en su poder lo que hoy revela Infobae en exclusiva. El plan de máxima es el de viajar a las islas para comprobar in situ la presencia de los restos del Alfa Eco 505 y los de su infortunada tripulación.

Las familias

Los familiares de la dotación del Alfa Eco 505 viven estas revelaciones con ansiedad y expectación. Ana Buschiazzo, viuda del piloto, dijo conmovida: "Es muy duro cerrar una historia sin tener la evidencia de lo que ocurrió".

Y siente con claridad que, si se encuentran restos humanos, estos deben permanecer en las islas. "Mi marido no hubiera querido otra cosa. Me había dicho que, si le pasaba algo, quería quedar allá".

Nora Di Motta, también habló sobre el hallazgo: "Agradezco a la familia de Aviación de Ejército por su contención. No importa el resultado, lo que vale es que hay personas que se están ocupando. Es una caricia al alma".

Hoy el sargento Di Motta sería abuelo. Christian, su hijo de dos años que quedó esperándolo, hoy tiene un hijo de 8.

Mario Gabriel Fiorito no conoció a su padre. "Fue una sorpresa después de tantos años enterarnos de que su helicóptero no cayó en el océano, como pensábamos".

Mario está casado, tiene un hijo de 23 y una hija de 19 y se alegra cuando habla con amigos de su papá. "Todos hablan maravillas de él; me siento muy orgulloso".

Los helicópteros del Ejército en las Islas 
Los helicópteros del Ejército en las Islas

Hoy, el helipuerto presidencial lleva el nombre de Fiorito, y en la placa se aclara que perdió la vida junto a Buschiazzo y Di Motta. Hay una plaza en Gualeguaychú que recuerda al sargento mecánico; a fines de 1982 también se colocó una placa en una plaza del barrio de Constitución que homenajeaba a Buschiazzo, que lamentablemente a la semana ya había sido vandalizada.

De todas formas, el 9 de mayo Aviación de Ejército conmemora el Día del Veterano de Malvinas en honor a sus únicos tres caídos.

Durante 36 años Malvinas es una herida abierta tanto para los que lucharon como para los familiares de los que quedaron en las islas. La probable solución al misterio del derribo del Alfa Eco 505, así como la identificación de un centenar de tumbas del cementerio de Darwin, podría ser el punto de reconstrucción de una historia que merece contarse con todas las letras.

Fuente: www.infobae.com