Por Mariano De Vedia
El primer Hércules en aterrizar en las Islas
Malvinas, restaurado el año a pasado
Al saldar una deuda con la historia, la I Brigada
Aérea de El Palomar recuperó el Hércules C130 TC-68, el primer avión militar
que aterrizó en Puerto Argentino a las 8.45 del 2 de abril de 1982 y que en los
últimos años se mantenía desactivado, con muchas de sus partes faltantes, en un
hangar de la base militar.
Fruto del envejecimiento y deterioro, la aeronave
había quedado a merced del desguace para que sus piezas sirvieran de repuesto a
otras unidades aéreas.
Casi la totalidad de las piezas que se incorporaron
son las originales del avión
La tripulación, al recibir el avión bombardero en
Córdoba, en mayo de 1982
Hace tres años, una nota en LA NACION mostraba el
avanzado deterioro de la nave, lo que llenaba de tristeza especialmente a la
tripulación que lo comandó durante el mes y medio que actuó como avión
bombardero durante la guerra. En los primeros meses de 2018, con vistas a
celebrarse los 50 años de la incorporación del sistema de armas C130 a la
Fuerza Aérea, las autoridades aeronáuticas advirtieron que había llegado el
momento para intentar su recuperación.
El Hércules hoy en la I Brigada Aérea de El Palomar
Por ahora quedará en la unidad, como símbolo de su
contribución al papel decisivo que la Fuerza Aérea tuvo en Malvinas. Pero los
oficiales y técnicos que trabajaron en su recuperación no descartan alcanzar
otro objetivo: ponerlo en condiciones de volar, confió el Comodoro Piuma.
El Hércules antes de su restauración
"Es común que, a los aviones, cuando dejan de
operar, se les quiten piezas para incorporarlas a otras aeronaves. Pero todo se
conserva. Las piezas se desmontan, pero no desaparecen", explicó el jefe
de la unidad.
El primer Hércules en aterrizar en las Islas
Malvinas, restaurado el año pasado
El Comodoro Piuma explicó que gracias al esfuerzo
del personal de la brigada el TC-68 fue recuperado, aunque todavía no está en
condiciones de volar. "Hoy no está para volar, pero la ilusión no se
pierde, comentó.
El primer Hércules en aterrizar en las Islas
Malvinas, restaurado el año pasado
El proceso de recuperación se extendió durante ocho
meses y los trabajos concluyeron en diciembre de 2018. El personal de la base
volvió a darle a la aeronave los colores que lució en Malvinas, verde y marrón,
con la panza celeste, con el camuflaje tradicional, conocido como "patrón
de Vietnam", para que pase desapercibido en el terreno de operaciones.
El personal de la base volvió a darle a la aeronave
los colores que lució en Malvinas
Se completó el cepillado, se prepararon las partes,
se restablecieron los interiores y los asientos de la cabina, y se procedió,
finalmente, al armado. Casi la totalidad de las piezas que se incorporaron son
las originales del avión. Muchos pilotos que lo habían manejado ofrecieron
consejos e ideas.
El compartimento de carga del Hércules restaurado
Las hélices del imponente Hércules
El Hércules C-130 TC-68 aterrizó en Malvinas en
medio de obstáculos en la pista del aeropuerto de Puerto Argentino, cuando aún
no habían terminado los enfrentamientos. Entre otras acciones que quedaron en
la historia, durante la guerra hizo vuelos rasantes que sorprendieron a las
embarcaciones británicas que procuraban abastecer a sus tropas. El escuadrón
tenía base en Comodoro Rivadavia y desde allí trasladaba al personal y llevaba
material a las islas, en vuelos de dos horas. Se lo conoce como el
"Hércules bombardero", porque se lo acondicionó en Córdoba
especialmente para transportar bombas.
Hoy está ya posado en la plataforma militar de la I
Brigada Aérea de El Palomar, a la espera de su futura misión.
El Comodoro Piuma explicó que gracias al esfuerzo
del personal de la brigada el TC-68 fue recuperado, aunque todavía no está en
condiciones de volar
Fuente: https://www.lanacion.com.ar
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